Desde el Movimiento de Mujeres Palestinas Alkarama, denunciamos el asesinato cometido por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) contra la periodista Shatha al-Sabbagh en el campo de refugiados de Jenin, en la madrugada del sábado 28 de diciembre, a raíz de una redada en dicho campo. Exigimos, al igual que su familia y el Sindicato de Periodistas Palestinos, que este hecho sea investigado de manera independiente y no quede impune.
No es tiempo de silencio y no seremos nosotras las que callemos frente a esta agresión en curso por parte de la ANP, sirviendo de “agentes de seguridad” a Israel y Estados Unidos contra nuestro pueblo, criminalizando y reprimiendo la legítima resistencia al colonialismo sionista.
Esta corrupta Autoridad, creada a instancias de los ilegítimos Acuerdos de Oslo, lejos de representar los intereses de nuestro pueblo y luchar por su liberación, se ha convertido en el brazo ejecutor de los intereses de la ocupación, su brazo armado adicional. Desde hace más de 20 días ha intensificado los brutales ataques y persecución a los habitantes en el interior de los campos de refugiados de Jenin, imponiendo un verdadero asedio con asesinatos y arrestos de combatientes, aplicando restricciones de movimiento, bloqueando las rutas de acceso y salida, cortando los servicios de agua y electricidad. Abbas está dispuesto a sacrificar y traicionar a su pueblo por los intereses mezquinos de él y su camarilla que buscan mantener sus propios privilegios y ser los nuevos “gerentes” de lo que quede de Gaza una vez concluida la guerra genocida. Sin embargo hace tiempo que ha perdido consenso y es cuestionado en la limitada zona que la ocupación le deja para ejercer su poder, y es sobre todo la gente joven la que más lo rechaza porque ve el nivel de estancamiento actual y la falta de perspectivas a futuro que ofrece esta fallida Autoridad.
Esta juventud, a la que ataca de manera deliberada, es la que promete no rendirse, es la que se viene organizando desde hace unos años atrás, la que en 2021 protagonizó la Intifada de la Unidad y la que mantiene las estrategias de resistencia a la ocupación que la Autoridad Palestina hace rato ha abandonado para acomodarse a la clase de la elite del poder.
Todo esto ocurre mientras la ocupación intensifica el genocidio en Gaza, los ataques a la población palestina en Cisjordania y Jerusalén, expande los asentamientos de colonos fuertemente armados que han ejecutado innumerables pogromos contra las aldeas palestinas y extiende su expansionismo genocida sobre territorio sirio.
Como movimiento de mujeres palestinas, abrazamos la determinación de nuestros combatientes y pueblo en su lucha por la liberación del yugo colonial-sionista y en su clamor por justicia, condenamos esta sumisión de la Autoridad Nacional Palestina en la figura de Mahmoud Abbas y al mismo tiempo hacemos un llamamiento a nuestras hermanas y hermanos a formar un gran frente nacional de unidad que contenga a todos los sectores que componemos el pueblo palestino, tanto en los territorios de la Palestina histórica como de la diáspora para construir juntos y avanzar en un movimiento que nos lleve a la liberación de definitiva de toda palestina desde el río al mar y al derecho al retorno.